Por fin empiezan mis vacaciones, creí
que no llegarían nunca, pero una vez pongo en silencio mi teléfono, me hago mi
coleta bien alta, vestidito, chanclas y lleno el depósito… los males pasados
parecen menos males. Música de Adele y ¡hale! Dirección sur buscando el Montgó
en el horizonte.
He vivido unos años a medio
kilómetro del Hotel Villamor, pero como nos ocurre a casi todos, una necesita
irse para echarlo de menos y para verlo con ojos de turista y conocerlo mejor.
Antes lo disfrutaba de otra manera: paseaba alrededor del hotelito casi todos
los días. Esta zona del kilómetro 3 de Las Marinas me encanta porque no hay
construcciones altas. Además, desde aquí hasta el kilómetro 5 la playa se hace
más ancha y más limpia. ¡Qué atardeceres rojos se pueden disfrutar en estas
fechas!
Playa de las marinas, enfrente del Villamor. |
El Hotel Villamor es
sorprendente, es un espacio joven, libre, abierto, atrevido, inusual,
diferente, peculiar, fresco… En general son espacios abiertos en colores
neutros y de repente un techo naranja o una moqueta de mil
colores que te alegra la mañana. En Dénia hay hoteles grandes de viaje de
imserso, hoteles pequeños con encanto tipo antiguo que también me encantan,
etc., pero no hay nada parecido a este hotelito de decoración tan actual,
divertida y osada.
Además, estas chicas no paran de
ponerse retos y tienen una página en Facebook donde ponen unas fotos que me
alegran el día cuando las veo desde la oficina.
Así que no lo dudéis si queréis
quedar bien con alguien que quiere un alojamiento diferente con un trato como
si fueras un amigo de toda la vida y a un paso del mar en Dénia… por cierto, es sábado y es tarde, mi fin de semana de libro y playa en el Hotel Villamor me
espera…